Contratistas participan en programa DEPE
El Programa en Prevención de la Corrupción de Empresas para Empresas (DEPE) tiene como principal objetivo ayudar a las empresas a desarrollar e implementar mecanismos y sistemas efectivos contra las malas prácticas en la lucha contra la corrupción y para la prevención de delitos. En nuestro país, está enfocado en las pequeñas y medianas empresas del sector construcción, dándoles herramientas útiles que les ayuden establecer un programa de cumplimiento anticorrupción y una manera transparente e íntegra de hacer negocios. En esa línea, 6 de nuestras contratistas participaron activamente de tan importante programa.
A lo largo del 2021, el Programa DEPE ayudó a capacitar alrededor de 150 representantes de pymes, la mayoría de los cuales consiguieron culminar exitosamente su capacitación, donde se incluyen los seis representantes de la cadena de valor de Cálidda: S&E, Construredes, P.A. PERU, Alfa Co., GyA y Sole. La capacitación fue emitida por Alliance for Integrity como parte del Proyecto de USAID Inversión Pública Transparente y el Programa de Gobernanza de la Cooperación Alemana al Desarrollo (GIZ).
Gracias al Programa DEPE, nuestros contratistas recibieron una capacitación donde destaca el enfoque práctico, con ejemplos y casos de estudio. Con ocho horas de formación, divididas en cuatro módulos. En este espacio se abordan conceptos básicos anticorrupción, así como mecanismos a implementar al interior de la empresa como códigos de ética, políticas antisoborno, análisis de riesgo y un modelo de prevención, contra la corrupción.
Conversamos con Paola Barragán, directora del Proyecto de USAID y Jessica Soto, lideresa de Participación del Sector Privado, quienes nos señalaron la relevancia de la asistencia de Cálidda para nuestros contratistas:
“Una excelente práctica promovida por el Programa DEPE es el involucramiento de las grandes empresas con sistemas de prevención más maduros, quienes, a través de sus áreas de cumplimiento, conforman una red de expertos y expertas en prevención de la corrupción, que asumen el rol de entrenadoras y entrenadores DEPE, de manera probono, para capacitar a las pymes. En el Perú, el Proyecto de USAID Inversión Pública Transparente (TPI) y sus aliados estratégicos lograron conformar una red de más de 25 expertos y expertas en cumplimiento, proveniente de más de 15 grandes empresas y firmas de consultoría legal que operan en el Perú, quienes transfirieron su conocimiento y experiencia a través de 670 horas brindadas a lo largo de las 5 rondas de capacitación que se implementaron a lo largo del 2021.”
Paola Barragán y Jessica Soto pusieron mucho énfasis en la importancia de una cultura de integridad y ética, indicando que los valores en los que se fundan las organizaciones y las empresas deben ser compartidos e interiorizados por los individuos que las componen, para así asegurar su cumplimiento y legitimidad: “El rol que tienen las asociaciones empresariales o gremiales y las empresas en promover y afianzar la cultura de integridad entre sus miembros y colaboradores es fundamental”.
La adopción de un programa de integridad, tal como lo promueve el Programa DEPE, es una herramienta poderosa para mitigar riesgos de sanciones o daños reputacionales, y para mejorar la percepción de la organización frente a clientes y a inversionistas. “El 100% de las empresas que participaron en el Programa DEPE, consideraron relevante o extremadamente relevante el programa y su contenido. Los líderes empresariales valoraron la iniciativa de concientizar a las pequeñas y medianas empresas en adoptar un programa de prevención de la corrupción. Como las empresas privadas, con los demás actores de la sociedad, forman parte del sistema social en el que interactúan y se vinculan, mientras más empresas adopten programas de integridad mayor será el rol del sector privado como motor de cambio en el sistema de integridad del Perú”, resaltan.
En el marco de los desafíos a superar para alcanzar de manera ideal una cultura de ética e integridad en las empresas, nos remitimos al informe de Integridad Global 2020, basado en una encuesta a 3,000 empleados de empresas, en 33 países del mundo, realizado por Ernst & Young (EY), una de las firmas más importantes de servicios profesionales en el mundo. De la lectura de dicho documento, podemos inferir que existen cuatro retos específicos a enfrentar para consolidar buenas prácticas institucionales:
- El temor a represalias de los empleados al informar sobre malas prácticas en su empresa.
- La falta de discusión por parte de las direcciones sobre la importancia de un comportamiento íntegro en su organización.
- La tolerancia al comportamiento poco ético de los empleados de alto rendimiento por parte de las gerencias.
- La desconfianza en que los directivos o altos cargos demuestren un comportamiento íntegro.
El rol de las percepciones juega un papel protagónico en el contexto de implementación de una cultura organizacional ética. El mencionado informe sirve para comprender las problemáticas y desafíos pendientes de forma integral.
Dentro de los casos de éxito del Programa DEPE, se cuentan pequeñas y medianas empresas que operan en diversas regiones del país. Las ejecutivas del Programa de USAID, nos comentan como luego de la capacitación, una empresa, que opera principalmente en Cusco, tomó la decisión de iniciar la adopción de un modelo de cumplimiento anticorrupción, conducente a su certificación, incluyendo la implementación de mecanismos como una matriz de riesgos, un código de ética, cláusulas anticorrupción en los contratos de sus proveedores, entre otros.
Es así como gracias a tan importantes espacios de capacitación, Cálidda sigue afianzando la ética e integridad en su cultura organizacional, buscando permear con buenas prácticas corporativas a sus directores, personal administrativo, colaboradores y contratistas. Nuestro compromiso con la lucha anticorrupción es sólido y permanente. Solo protegiendo la institucionalidad del país a través del comportamiento íntegro de las organizaciones, podremos seguir llevando desarrollo y calidad de vida a más familias.