El gas natural llega por primera vez a zonas altas en Bayóvar

La comunidad de Bayóvar en San Juan de Lurigancho se despide del humo provocado por el uso de la leña y de la carga de pesados balones de GLP por empinadas escaleras. Hoy, gracias al esfuerzo conjunto de Cálidda, el Ministerio de Energía y Minas y OSINERGMIN, esta comunidad se beneficia de sus primeras conexiones de gas natural, energía que ha cambiado su forma de vivir de forma extraordinaria.

Las primeras conexiones en zonas altas

La reciente instalación de las primeras 39 conexiones de gas natural en las zonas altas de Bayóvar marca un hito trascendental en la historia de esta zona dentro del distrito más poblado de Lima. Por primera vez, estas familias tienen acceso a un combustible seguro, asequible y eficiente.

“Llevar el gas natural a los peruanos que viven en las zonas elevadas representaba una serie de desafíos técnicos y de seguridad, por lo cual convocamos a Cálidda para que, de manera conjunta, se desarrolle un proyecto piloto de instalación de redes de gas natural en San Juan de Lurigancho que garantice la seguridad, calidad y continuidad del servicio”, señaló Omar Chambergo Rodríguez, presidente de Osinergmin.

Este es solo el comienzo de un proyecto que forma parte de una iniciativa más amplia de masificación del gas natural llamada “Laderas”, que busca llevar el gas natural al resto de las laderas de la capital. Así, en las zonas altas de Bayóvar se tiene como objetivo beneficiar a más de 400 familias con las siguientes instalaciones a realizar.

“Nuestro primer proyecto para ofrecer redes de distribución de Gas Natural a nuestros vecinos de las zonas altas de Lima ya es una realidad. Las zonas vulnerables son prioridad y el principal foco de la masificación, por lo cual este hito cobra especial importancia para nosotros y para todas las familias que se verán beneficiadas”, señaló Martín Mejía del Carpio, director general de Cálidda.

Grandes beneficios para la comunidad

El gas natural brinda ahorros significativos para los hogares en sus quehaceres domésticos y también cimenta el camino hacia un futuro más próspero quienes tienen negocios, pues muchos de sus residentes tienen emprendimientos propios que requerían el alquiler de cocinas en zonas bajas del sector. Ahora, con las conexiones dentro de sus hogares, pueden realizar la cocina de sus postres y platillos para venta sin costos de alquiler adicionales.

Sin embargo, el impacto del gas natural va más allá de lo económico. Con la llegada de este recurso, las familias de Bayóvar pueden despedirse del humo y la contaminación provocados por la quema de leña. Ahora, cocinar es más seguro y saludable, y el medio ambiente local se beneficia de una reducción significativa en las emisiones de gases nocivos.

Además, el gas natural elimina la necesidad de transportar pesados cilindros de gas por largas escaleras. Esto no solo alivia la carga física de los residentes, sino que también reduce el riesgo de accidentes y lesiones asociadas con el transporte de estos balones.

La llegada del progreso para más peruanos

El éxito de este proyecto piloto en Bayóvar sienta un precedente importante para futuras iniciativas de masificación del gas natural en otras zonas altas de Lima y más allá. Este logro demuestra la importancia del trabajo colaborativo del gobierno y el sector privado, pues cada uno desempeñó un papel crucial en la planificación, implementación y supervisión de este proyecto histórico.

Este el comienzo de una nueva era de progreso y prosperidad donde todos somos partícipes de la inclusión energética. Desde Cálidda, mientras miramos hacia el futuro, podemos estar seguros de que el gas natural seguirá siendo un aliado poderoso en el viaje hacia un Perú más justo, próspero y sostenible.