En la emergencia que vivimos, todos tenemos una responsabilidad. Algunas son evidentes y las agradecemos a diario: lo que hacen nuestras autoridades, el personal de salud y las fuerzas del orden para cuidarnos a todos está a la altura de una crisis sin antecedente alguno.
En Cálidda, nuestra principal responsabilidad es que cerca de un millón de familias y miles de empresas y negocios en Lima tengan acceso permanente y seguro al Gas Natural. No es un trabajo visible, mucho menos en estas circunstancias, pero es un deber que nos llena de energía para trabajar desde donde corresponda.
El Gas Natural es modernidad, bienestar, seguridad, ahorro y cuidado del ambiente. Saber que ese es nuestro mayor aporte hace que los equipos que están trabajando remotamente desde sus casas tengan la misma energía de hace varias semanas, cuando nos podíamos ver en la oficina y motivarnos los unos a los otros. Y también hace que todos en Cálidda nos pongamos de pie por nuestros equipos de Operaciones y de Emergencias, que en medio de esta cuarentena hacen un gran esfuerzo para estar en los centros de control y en las calles asegurando la continuidad y seguridad de nuestro servicio.